Al menos cinco muertos y 20 heridos dejó un bombardeo en el centro de Jersón, en el sur de Ucrania, lo que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, denunció este sábado 24 de diciembre como un acto de «terror» ruso para «intimidar» a los ucranianos en la víspera de Navidad.
«Por la mañana, el sábado, la víspera de Navidad, en el centro de la ciudad. No son instalaciones militares. No es una guerra según las reglas definidas. Es el terror, es por intimidación y placer», criticó en las redes sociales.
El jefe adjunto de la administración presidencial, Kirilo Timoshenko, detalló que el ataque dejó «al menos cinco muertos y 20 heridos».
«Esta es la verdadera vida de Ucrania y de los ucranianos» desde hace diez meses de guerra, dijo el presidente ucraniano, acompañando su mensaje con fotografías que muestran la amplitud de los daños.
Un equipo de AFP en el lugar escuchó una serie de bombardeos que impactaron el mercado central y las calles cercanas, y luego vio el cuerpo de al menos una persona muerta en su vehículo. Según el equipo de la agencia informativa, a mitad del día aún se escuchaban los bombardeos.
Cerca del mercado, un hombre estaba gravemente herido en la cabeza y su vehículo fue destruido por la explosión. Otras personas heridas estaban cerca.
Había llamas en el mercado, lugar frecuentado el sábado por la mañana y situado en el corazón de Jersón, ciudad que el ejército ucraniano recuperó en noviembre, en medio de una exitosa contraofensiva, después de ocho meses de ocupación rusa.
La ciudad ha sido blanco de ataques rusos en las últimas semanas, sobre todo en sus instalaciones energéticas. EFE