En los años que hemos permanecido en la contienda política, no solo cuando apareció El chavismo en la vida política del país, sino, cuando luchábamos en la políticas del Pan, Tierra y Trabajo y los amigos socialcristianos eran una oposición digna para los socialdemócratas y viceversa; en ese recorrido la juventud y la formación iban de la mano como la corrupción era señalada, y era también gran motivo de vergüenza. Hoy vemos que con musiquitas, propaganda y chequera gubernamental se desean desviar los posibles señalamientos.
En estos nuevos tiempos con las tramoyas conocidas por estos actores y sus entornos demasiados bien acomodados por cierto, no lograron ocultar por años el manejo de los contratos, como el pagar y quedarse con el vuelto, en áreas definidas como la jardinería, la construcción de plazas, asfaltos sobre pagados y las constantes reconstrucciones en obras civiles; donde se escapaban recursos que hondaron en empresas fantasma.
¿Quiénes? con cuatro dedos en la frente logran concebir el poder económico de algunas organizaciones, que estando en oposición en referencia al régimen; se puede dar el lujo de mantenerse durante 25 años aproximadamente. La compra de dirigentes excelentes de otras toldas políticas que sucumbieron ante el hambre y la pobreza fueron reducidos miserablemente. Pero en su momento dieron sus rostros de esperanza para un cambio en la región. Por otra parte, “Los brillantes dirigentes” de estos tiempos poseen propiedades inimaginables en otras latitudes, que no resistirán una investigación.
Nuestros adversarios políticos, no son nuestros enemigos, me refiero al chavismo, sentimos que el verdadero enemigo real y aplastante es el que está en los Cóndores y es de cuidado extremo por su muy interesado manejo de la política; por lo demás sabemos que la tarjeta de tarjeta de la MUD que represento en otros procesos el 75% del electorado, recordando siempre que solo su partido le dio 2.75%, ante la tarjeta de la MUD, no somos idiotas.
Los esfuerzos de encajonar a la oposición venezolana en estos nuevos escenarios políticos electorales fueron en vano se vieron limitados a ciertas franquicias clientes del mejor postor. No así, la decisión y el estilo innovador de María Corina y el estilo sobrio de Edmundo Gonzales Urrutia. que dieron en ese cruce de la 72 con Bellavista el deseo del cambio en el país y luego seguramente en el Zulia, por lo que ya conocemos de la nueva ciudadanía.
Finalmente, como sabemos las mareas no tienen color, pero la fuerza de la moral no la dirigen las viejas formas, sino, los nuevo valores, la valentía y el coraje, los nuevos rostros, las virtudes y la decencia. A veces en la vida se pierden el norte de los eventos dicen que el Poder envanece, pienso que el tiempo llegara a su fin y tendrán que dar cuenta como el chavismo de lo que poseen estos mercaderes del futuro de un pueblo. (No es odio, Dios nos guarde, es sed de justicia)
Dr. José Ernesto Pons B/@JosePonsB / autor del libro “EL ESTADO PSICOSOCIAL LATINOAMERICANO”
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