Pese a sus contradicciones, las toldas progresistas buscan obtener mayoría en el Parlamento

Los resultados de las elecciones al Parlamento Europeo efectuadas hasta el domingo 9 del corriente, movieron el piso en numerosos países ante el crecimiento de la ultraderecha en el viejo continente, al punto de que, de inmediato, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció el adelanto de las elecciones a la Asamblea Nacional para el próximo domingo 30 en su primera vuelta y el 7 de julio en su segunda.

Una de las razones fue que entre las grandes vencedoras de los comicios europeos estuvo Agrupación Nacional (RN por sus siglas en francés), el partido de extrema derecha de Marine Le Pen y Jordan Bardella, quien a los 28 años inclusive podría postularse a primer ministro de esa nación, obligando a un reagrupamiento de fuerzas en todos los ámbitos.

Hasta importantes referentes del fútbol galo como Thuram, Thierry Henry y Mbappé se pronunciaron frente a esa posibilidad:

“Tenemos valores de convivencia, de tolerancia y de respeto. Cada voto cuenta y no hay que despreciarlo. Espero que se tomará la buena decisión y que seguiremos estando orgullosos de llevar la camiseta de la selección francesa el 7 de julio”, dijo este último.

El jueves 13, el partido de Macron, Renacimiento, anunció una alianza con toldas afines de centroderecha bajo el lema “Juntos por la República.

Frente Popular

La izquierda también actuó. El lunes 10, los representantes de La Francia Insumisa (LFI), el Partido Socialista (PSF), el Partido Comunista (PCF) y los Verdes informaron la conformación del Frente Popular, con el fin de “combatir el proyecto racista de la extrema derecha”, al mismo tiempo que intentan evitar un triunfo del “macronismo”.

Ya para el jueves 13 tenían un programa conjunto -como harán con las candidaturas-, planteando entre otras cosas la derogación de la cuestionada reforma del régimen de jubilaciones, que en 2023 originó numerosas manifestaciones en toda Francia y el reconocimiento al Estado de Palestina.

En un trabajo publicado en el portal español Lamarea.com el 14 de este mes bajo el título “Elecciones legislativas en Francia: la unión hace la fuerza”, el sociólogo Arsenio Cuenca resaltaba que luego de convenir la repartición de las circunscripciones, solo faltaría por definir el candidato a primer ministro, barajándose los nombres de Laurent Berger, del mundo sindical, François Ruffin (LFI), Jean-Luc Mélenchon (LFI) o al secretario general del PCF, Fabien Roussel.

Cuenca, explicaba que “en estos momentos, se puede apreciar la riqueza del tejido asociativo francés”, para agregar que “desde abajo se librará un combate crucial: un informe del IFOP -Instituto Francés de Opinión Pública- muestra que, mientras que el 32% del electorado estaría dispuesto a votar por su partido de izquierdas de preferencia, solo el 25% votaría al nuevo Frente Popular. Esto quiere decir que una parte importante de la izquierda moderada no ve con buenos ojos la coalición, probablemente por la presencia de LFI. Por ello, una parte del electorado de izquierdas tendrá como reto convencer a los que, en teoría, comparten con ellos signo político frente a Macron y la extrema derecha”.

“No ocurre con frecuencia, pero en esta ocasión, el pragmatismo y la unión están del lado de la izquierda, mientras que las divisiones se encuentran en la derecha”, agregaba el sociólogo, quien reflejaba algo de optimismo: En este momento, hay razones para pensar que el nuevo Frente Popular pueda hacer frente al RN en la Asamblea. Algunas estimaciones, basadas en el voto de las europeas, dan a la unión de izquierdas una horquilla de 180-220 diputados, atribuyendo 200-240 al RN y pronosticando el descenso a 80-100 parlamentarios del partido de gobierno. El destino de los franceses está en sus manos. De ellos depende convencer a amigos y familiares, en los centros de trabajo y de estudios, para evitar el peor de los escenarios”.

Marine Le Pen y Emmanuel Macron

Todos contra Macron parece ser la consigna

Apenas el jueves pasado, Aurélien Rousseau, quien hasta diciembre era ministro de Salud del gobierno del presidente francés Emmanuel Macron, recalcó que se lanzaría a diputado por el Frente Popular debido a que su antiguo jefe había comenzado a inclinarse a la derecha.

Ello, pareciera ser un reflejo de lo que es la actualidad en Francia, donde desde distintas posiciones hay realineamientos en una suerte de “todos contra Macron”.

“Ha habido un momento de cambio del eje político del presidente, esta elección política yo no la comparto”, declaró ese día Rousseau, quien tambiéncuestionó al partido del mandatario, Renacimiento,

Macron es el más golpeado en la actual coyuntura, debido entre otras a que su gobierno “se ha caracterizado por la profundización en la pérdida de derechos sociales y civiles en la República Francesa. Solo frenados, en varias ocasiones, por intensas protestas sindicales, que se han mantenido y desarrollado por todo el país; o por movimientos de gran relevancia como el de los Chalecos Amarillos o las protestas contra la reforma del sistema de pensiones”, según un trabajo hecho para RT por la analista internacional Carmen Parejo Rondón, quien también colabora con Telesur.

Ella asegura que “si el Nuevo Frente Popular obtiene los resultados necesarios en las elecciones legislativas, veremos un gobierno de cohabitación entre estas fuerzas y Macron”.

Jordan Barbella

Bardella: el nuevo rostro de la extrema derecha

El que podría convertirse en el nuevo primer ministro de Francia si la ultraderecha representada por Agrupación Nacional (RN, por sus siglas en francés) gana las legislativas, es un joven de 28 años que se ha convertido en el delfín de Marine Le Pen, la principal figura de ese partido.

Carismático, con amplia presencia en las redes, con más de un millón de seguidores en Tik Tok -convirtiéndose en un atractivo para la juventud-, entró a la política en 2005 con 17 años, uniéndose de inmediato a la tolda de la cual hoy es la principal figura, después de la propia Le Pen, quien incluso en 2015 llegó a expulsarlo del partido tratando de distanciarlo de su sector más radical.

En noviembre de 2022 fue elegido como sucesor de la propia Le Pen en la presidencia de RN, cargo que se espera ocupe durante muchos años.

Bardella, se opone al apoyo a Ucrania contra Rusia y es partidario de limitar la libre circulación de migrantes mediante controles fronterizos.

Ante los ataques que recibió previo a las elecciones al Parlamento Europeo, donde lo acusaron de provocar el fin de la UE, a la que dice querer debilitarla desde adentro, respondió: “No estoy en contra de Europa. Estoy en contra del funcionamiento de Europa”.

Héctor Barrios S./pasanteNoti/Imágenes

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