Orlando Cuicar
Lorenzo, el modelo centralista presidencialista de las economías latinoamericanas, no solo se concentran en las nomenclaturas gubernamentales, sino en otras organizaciones tales como las políticas que forman los contrapesos de los poderes constituidos, y el de mayor relevancia lo constituyen los partidos políticos, y ambos, partidos políticos gobierno son las construcciones institucionales más importantes en los países atrasados, y Venezuela no escapa a tal situación.
Tal desfiguración del Orden Institucional, político y económico, deviene en democracias fallidas y atraso económico en una sociedad. De modo que para poder progresar y mejorar un estándar de vida, que por regla general recae en el hombre productivo a través del trabajo » físico, intelectual, ético, académico y gerencial», la vía más fácil de los que no son competitivos, lo encuentran ascendiendo al poder político y gubernamental y por ello tiene más valor para el que carece de talento trepar hacia la cumbre de los que tienen posibilidades y poder en la capital.
Tal modelo político centralista excluyente en Vzla, parieron a los famosos » delfines » y » favoritos en los Estados » que llegaron al poder por imposiciones directas e indirectas de los capitostes centralistas buenos para nada.
Por ello, para ascender sin contra pesos, cuando los grandes partidos políticos implosionaron como consecuencia de las dictaduras políticas impuestas desde Caracas, entonces, se construyeron los nuevos partidos políticos como nomenclaturas cerradas con propietarios eternos, tras la búsqueda de borregos útiles, para ascender al poder, donde el ciudadano militante se convierte en » devoto pasivo sumiso » al propietario de las nomenclaturas específicas. Aquí solo militan ciudadanos obedientes sin cultura política, donde no hay discusiones de ideas ni construcción de agendas en función del bienestar del pueblo, pues, todos los guiones vienen hoy por WhatsApp.
Por ello, en una sociedad desempleada, sin empresas, sin producción con un mercado que solo llegan productos de subsistencia mínima, para ascender económicamente, debe establecer relaciones con los que tienen y/o tendrán el poder, y por eso vemos una caterva de oportunistas con méritos muy inferiores a otros, como se pelean para aprovechar a las multitudes que sueñan con un cambio que les permita trabajar libremente y producir el pan dignamente con el sudor de su frente y no con limosnas y cuentos de camino.
El pueblo va a votar contra Maduro y su pandilla de ladrones, María Corina tiene hoy el aprecio del pueblo, pero, si lleva lastre de individuos que no han gozado del aprecio del pueblo, su gobierno y gobernanza se verán en serias dificultades.
Cuando CAP, en su segundo gobierno sumo a su lado a una caterva de individuos » con mucho discurso y poca eficiencia» y las gobernaciones nombradas a dedo, el malestar por la imposición del ajuste macreoconomicos de schok, el pueblo no lo resistió porque las nomenclaturas políticas no tenían consenso en las bases y los mandatarios nombrados no estuvieron capacitados para llevar a cabo el programa de ajustes que se imponía.
Por ello, en campaña electoral señalar candidatos a lo que sea es extemporáneo, porque envía señales desalentadoras.
Economista, Proyectista. Prof. Titular
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