En esta nota exploraremos la visión de Gates sobre los retos y oportunidades que nos depara el mañana, a través de la óptica de una pregunta que podría revelar secretos inesperados sobre el destino de la humanidad.
Bill Gates, la mente brillante detrás de Microsoft, se ha hecho una pregunta intrigante: ¿cuál es la única interrogante que le haría a un viajero del tiempo del año 2100?
Para este magnate de la tecnología, es evidente: la pregunta no se referiría ni a su familia ni al precio de las acciones de Microsoft. En su lugar, preguntaría: ¿están prosperando los seres humanos?
«Al final, todo se mide por el bienestar humano», dijo Bill Gates en el último episodio de su podcast «Desconfórmame», recogido por la cadena CNBC.
Un pequeño viaje hacia lo desconocido
En el episodio, el multimillonario cofundador de Microsoft entrevistó a la científica de datos de la Universidad de Oxford Hannah Ritchie, cuyo libro «Not the End of the World» (No es el fin del mundo) ofrece una visión optimista de cómo el mundo puede ganar la batalla contra el cambio climático.
En la entrevista, Gates preguntó a Ritchie por las «principales preguntas» que le haría a un viajero del futuro. Su respuesta: ¿Qué porcentaje de la población mundial podría vivir con 20 dólares al día en 2100?
La respuesta revelaría bastante sobre los índices de pobreza del futuro, y si «hemos avanzado en salud, agricultura y pobreza», dijo Ritchie.
En la actualidad, más del 9% del mundo -más de 700 millones de personas- tiene que subsistir con menos de 2,15 dólares al día, un nivel que indica pobreza extrema, según el Banco Mundial.
Si en 2100 una parte significativa de la población vive con menos de 20 dólares al día, especialmente en los países de ingresos más bajos, eso «sería un logro asombroso», afirmó Ritchie, y una señal de que la humanidad probablemente ha avanzado en la mitigación del cambio climático.
«Mi hipótesis sería que el cambio climático no habría tenido un impacto extremadamente devastador, donde la agricultura se arruinara y los resultados sanitarios fueran realmente malos, y la gente se viera sumida en la pobreza», dijo Ritchie.
La visión de Bill Gates
Al principio, Gates dijo que preferiría indagar sobre la generación de energía y la inteligencia artificial.
«¿Cómo se genera la energía? ¿Es fusión o fisión o alguna cosa inesperada?», preguntó. «Y luego entender cómo la IA les ayudaba a conseguirlo… o cómo se enfrentaban a ese reto».
La fusión y la fisión son dos tipos de energía nuclear. Gates las ha promocionado como fuentes prometedoras de energía limpia (cofundó la empresa TerraPower en 2006) que pueden ayudar a combatir el cambio climático.
Bill Gates también ha rechazado varias hipótesis catastrofistas sobre el avance de la inteligencia artificial, afirmando que la tecnología puede ayudar al mundo a resolver problemas globales en ámbitos como la sanidad y la educación.
El magnate sigue siendo asesor de Microsoft, empresa que ha invertido miles de millones de dólares en la startup de investigación en IA OpenAI, tras abandonar su consejo de administración en 2020.
Pero después de reflexionar, a pesar de sus intereses personales en la energía y la IA, Gates cambió de opinión y alineó más su respuesta con la pregunta de Ritchie.
La mejor investigación sería la que revelara el bienestar general de los seres humanos en todo el mundo, dijo.
«Tienes razón», dijo Gates. «El boletín de notas no es la táctica. Es la calidad de vida».
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Héctor Barrios S./Pasante
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